Hace como cuatro años, cuando estaba de moda el libro todavía, fui a la biblioteca del Colegio de México a resolver tareas de la carrera. Ahí estaba llenando las papeletas para la consulta del material y se me ocurrió pedir el libro. Ojeé mis cosas y después me di un rato para revisar el viscerrealismo, leí hasta que me cerraron. Ya después, cuando me hice de un poco de dinero lo compré, esa noche le avance como 200 páginas, el diario de García Madero me provocaba un chingo de curiosidad. Pues se narraban historias de poetas, historias de poetas en México, historias de poetas en México y de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, que más quería. No sé por qué, pero dejé el libro. Y ahí se quedo como dos años a un costado de mi cama. Encima de Cartas Cruzadas de Darío Jaramillo y de la Reina del Sur (la peor porquería de libro que he comprado). Hace una semana lo agarré de nuevo y me propuse a regañadientes terminarlo, Ya esta.
Pinche Cesárea Tinajero, no vales la pena para malgastar el final del libro así. Pinche Arturo Belano y pinche Ulises Lima, dónde esta su obra. Su poesía. Pinche realvisceralismo. Ñah !
Israel Chávez
Pd. Y todavía falta 2666 con sus 1125 páginas. A ver para cuando.
1 eyaculaciones:
¿Y qué, puto no te acuerdas cuando cantabas canciones de Maná?
Por cierto el Ciro y el papá de la Jaqueline te andan buscando.
Roberto (Gómez) Bolaño(s)
Publicar un comentario